Es un dato que pretende reflejar el estado de una situación, o de algún aspecto particular, en un momento y un espacio determinados. Habitualmente se trata de un dato estadístico (porcentajes, tasas, razones,..) que pretende sintetizar la información que proporcionan los diversos parámetros o variables que afectan a la situación que se quiere analizar.
Un indicador se toma o mide dentro de un período de tiempo determinado, para poder comparar los distintos períodos. La comparación de mediciones permite ver la evolución en el tiempo y estudiar tendencias acerca de la situación que miden, adquiriendo así un gran valor como herramienta en los procesos de evaluación y de toma de decisiones.
En este apartado se irán incluyendo los indicadores que se consideran de más relevancia para el seguimiento y análisis de las condiciones de trabajo a nivel regional. El análisis de la evolución de estos indicadores y las tendencias a corto y medio plazo podría permitir detectar nuevos riesgos emergentes, evaluar los resultados obtenidos por las políticas de actuación y obtener conclusiones que sirvan para orientar la adopción de medidas y políticas adecuadas, tendentes a mejorar las condiciones de trabajo y de seguridad y salud de la población trabajadora.
Los indicadores deben simplificar al máximo la información sacada de un conjunto de datos complejos, y paralelamente deben satisfacer criterios de claridad, de representatividad y de fiabilidad y deben ser actualizados cuando lo hagan sus fuentes, y analizados desde el punto de vista temporal.
Las fuentes de las que procedan los indicadores deben ser fiables y periódicas para permitir una continuidad en los análisis de evolución temporal de los indicadores. Por esta razón se dará prioridad a la información procedente de organismos de la administración (general y autonómica).