Discos duros
2.2 Diferencias entre HDD y SSD
A la hora de comprar un disco duro se pueden analizar muchos factores, sobre todo si se comparan unidades HDD y SSD. Algunos de estos factores a tener en cuenta serían los siguientes:
• Resistencia HDD: Si se cae el equipo (sobremesa, torre o portátil) o sufre un fuerte golpe debe ser un motivo de preocupación, ya que los HDD están construidos con piezas móviles que aumentan la probabilidad de daño. La resistencia se mide en unidades G, considerando generalmente que una aceleración de “un G” es igual a la gravedad estándar. Por lo tanto cuanto más alto sea este número de “Gs” que soporta el disco duro será más resistente. Actualmente algunos HDD si no están en funcionamiento tienen una resistencia de 300Gs.
• Resistencia SSD: Si se cae el equipo o sufre un fuerte golpe, éste se podrá arrancar de nuevo y permitirá trabajar como si no hubiese pasado nada. Los SSD están construidos de una forma más compacta, que disminuye la probabilidad de fallos si recibe algún impacto. Normalmente la resistencia de los SSD es de aproximadamente 1500 Gs que es 5 veces superior a un buen HDD.
• Lectura y escritura HDD: Los HDD típicos suelen tener tasas de transferencia de datos cercanas a 80 MB/s en operaciones de lectura y a 60 MB/s en escritura. Aunque algunos “modelos profesionales” o de “gama alta” alcanzan los 175 MB/s.
• Lectura y escritura SSD: normalmente los SSD típicos tienen una velocidad tasa de transferencia en operaciones de de lectura cercana a 250 MB/s y a 230 MB/s en escritura de datos. Por lo que son bastante más rápidos que un HDD normal. Además actualmente ya se pueden comprar modelos de gama alta que alcanzan los 540 MB/s en lectura.
• Calor HDD: Generan gran cantidad de calor. Esto se debe a que éste tiene partes móviles que producen la fricción de las piezas y un calor inevitable. Además el hecho de que estas piezas móviles estén en funcionamiento provoca por un lado un nivel de ruido, y por otro lado que se use bastante energía, que es crítica en caso de ordenadores portátiles.
• Calor SSD: Generan calor sobre todo en operaciones intensivas de lectura y escritura pero como suelen tener una carcasa de aluminio no se percibe tanto la cantidad de calor generada. Debido a que los equipos que tienen instalado un SSD no tienen partes móviles, no se produce fricción de piezas como ocurre en los HDD. Además en el caso de equipos portátiles la vida de la batería se prolonga.
• Probabilidad de fallo HDD: Existe una formula aritmética llamada MTBF (acrónimo de Mean Time Between Failures) que mide el promedio en horas que puede tardar un sistema en presentar un fallo. El MTBF de un HDD típico es de 300000 horas.
• Probabilidad de fallo SDD: Estos dispositivos suelen presentar un MTBF de tres veces superior que un HDD. De esta forma el MTBF de un SSD típico está entre 1000000 y 1500000 horas, aunque hay modelos que ofrecen 2000000 como el Samsung 850 pro. [3]