Este término designa una negociación entre los Gobiernos de los Estados miembros con el objeto de introducir modificaciones en los Tratados. Es un método para llegar a acuerdos fuera del procedimiento institucional de adopción de decisiones. Tiene una importancia fundamental en la integración europea, pues todo cambio en la estructura de la Unión o de los Tratados es el resultado de las negociaciones que se desarrollan en ellas. Las CIG más importantes de los últimos años han dado lugar a la celebración de los siguientes Tratados: el Acta Única Europea en 1986, el Tratado de Maastrich en 1992, el Tratado de Ámsterdam en 1997, el Tratado de Niza en 2001, y el Tratado de Lisboa en 2007.