“El lenguaje [musical] es común, pero cada ser es único y alberga o no en su interior la capacidad de invención.”
13.1. Planteamiento de la forma sonata
Cualquiera de vosotros habréis tocado, seguro, una obra con la estructura en Forma Sonata. ¿Sabéis por qué? La respuesta es sencilla. Porque la forma sonata se estableció como estructura imperante y hegemónica de los primeros movimientos (y, en ocasiones, otros movimientos) de cualquier obra bajo el nombre de Sonata (para piano o para cualquier otro instrumento), Cuarteto de cuerda, Trío, Trío con piano, Quinteto, Quinteto con piano, Sinfonías, Conciertos para solistas, etc. Es decir, que casi de forma automática, los compositores recurrieron a la misma estructura para escribir el primer (u otro movimiento) de sus obras durante el período de finales del Clasicismo y durante la mayor parte del Romanticismo. Esta práctica fue común desde la figura de Joseph Haydn (considerado como el padre de la forma sonata), desde finales del siglo XVIII hasta el siglo XIX. Incluso algunos compositores llegaron a seguir cultivando esta estructura en el siglo XX, aunque, como cabría esperar, con numerosos cambios y bajo otro punto de vista u enfoque musical.
La forma sonata que vamos a estudiar, ya determinada por Haydn, tiene su antecesora en la estructura binaria tipo suite, que se encontraba en todas las danzas que conformaban la Suite Barroca, que derivó en la Sonata Preclásica y más tarde en la forma sonata como hoy la conocemos (también existe la Forma Sonata Monotemática, que se puede encontrar en las primeras obras de Haydn).
En cualquier caso, todas las estructuras musicales son elementos vivos que evolucionan y se transforman a lo largo de la historia de la música. Es decir, la forma sonata no presenta las mismas características en Haydn, Mozart, Beethoven o Brahms; ni siquiera son iguales dentro de todas las obras de un mismo compositor (muy diferentes pueden ser las obras de juventud de las obras del periodo de madurez).
Entrando ya en materia, la forma sonata es una estructura ternaria ABA’ y a cada parte se le denomina tradicionalmente de la siguiente manera: A es la Exposición, B es el Desarrollo y A’ es la Reexposición. Esto podría asemejarse y compararse directamente con la pauta general de cualquier historia novelística o cinematográfica que todos conocemos: presentación, nudo y desenlace. De hecho, veremos que son muchas las similitudes y que, comparar la forma sonata con una narrativa puede ayudar, y mucho, a entender el discurso musical.
EXPOSICIÓN
En esta primera parte se presentan a los personajes en forma de secciones definidas con claridad por una tonalidad. Toda exposición contendrá:
- Introducción. Es la única sección que puede no estar. Su uso se relaciona más con la figura de Beethoven y compositores posteriores. Si aparece, el gran indicador es su tempo lento, que contrastará con el andante, allegro o vivace de la sección siguiente (donde realmente comenzaría la forma sonata).
- Sección A (o Conjunto temático A). Una sección que se halla en la tonalidad principal. Supongamos que nuestra Forma Sonata está en Do mayor. Será una sección conformada por varias frases, que pueden variar en número: desde una frase a varias. A cada una de ellas las iremos denominando como a1, a2, a3, etc. Todas ellas estarán claramente en Do mayor, por lo que presentarán una clara estabilidad tonal. No confundir la aparición de dominantes secundarias (o tonicalizaciones) con modulaciones.
- Transición. El fragmento que nos van a conducir hacia la Sección B. Esta sección reflejará movimiento e inestabilidad, con abundantes cambios armónicos, progresiones modulantes (o no modulantes) y una textura que puede tender a la contrapuntística. La transición se inicia de dos maneras:
- Con una última frase an que, una vez iniciada y pareciendo una repetición de alguna frase anterior, comienza a modular y nos sorprende con movimiento e inestabilidad;
- De forma súbita y por sorpresa.
Como se puede ver, la Exposición es la presentación de los protagonistas que aparecen en la Sección A y en la Sección B que entran en conflicto mediante sus centros tonales; habrá un enfrentamiento entre el tono principal de la obra de la Sección A con el tono de la Sección B.
Además, muy importante, apreciar el equilibrio entre las secciones de estabilidad y movimiento que rigen toda la Exposición. Es decir, la sonata no deja de constituir una historia contada por el compositor en el que se presentan varios temas melódicos enfrentados entre sí por sus centros tonales (Exposición). Estos evolucionan, se relacionan entre ellos, les ocurren distintos procesos (Desarrollo) y, finalmente, reaparecen en su forma original, reconciliados bajo el mismo centro tonal (Reexposición).
DESARROLLO
En esta gran sección, el compositor hace gala de sus habilidades y destreza compositiva. Aunque es una parte de la obra muy libre y que se escapa por completo a ningún patrón o modelo, sí que podemos hablar de dos tipos de Desarrollo:
- Primer tipo: los que de verdad elaboran el material. A los protagonistas de nuestra historia, es decir, los materiales temáticos de la Sección A y Sección B de la Exposición. A estos les ocurrirán una serie de transformaciones o elaboraciones. ¿Qué quiere decir esto? Reaparecerán material o motivos melódico-rítmicos. Pero, seguramente alterados y cambiados con respecto a su apariencia original (es decir, afectados y manipulados por distintos procesos de elaboración temática).
- Segundo tipo: aquellos que presentan nuevos elementos melódico-rítmicos. Como en cualquier historia, pueden aparecer personajes secundarios, es decir, que puede aparecer material melódico-rítmico nuevo, frases c1, c2, c3…
La organización del desarrollo será por frases (las cuales podrán ordenarse, a su vez, en periodos binarios o ternarios), guiadas como siempre por los procesos cadenciales. Existen algunas características o procesos típicos dentro del desarrollo como:
- Es una gran sección caracterizada por la inestabilidad y el movimiento; gran carga cromática con dominantes secundarias o abundantes modulaciones, un ritmo armónico que tenderá a ser más acelerado, una textura que tenderá más al contrapunto, progresiones melódico-armónicas o progresiones en forma del proceso conocido como Método 1, 2, 3. Cualidades, por cierto, similares a las de la transición de la exposición.
- Es muy común iniciar el desarrollo con material melódico-rítmico de la exposición cambiado de modo, arrojando así un carácter de luz o de sombra. En una obra en modo mayor, comenzar el desarrollo en modo menor tiene un gran efecto sobre el oyente.
- Suele finalizar con una pedal de dominante que acumula toda la tensión para resolver, impepinablemente, en la tónica principal de la forma sonata en la Reexposición. De hecho, suele reforzarse la dominante con el uso del acorde de Sexta Aumentada (con su función de dominante de la dominante).
REEXPOSICIÓN
Básicamente, la repetición de la exposición. Por supuesto, añadiendo algunas consideraciones a tener en cuenta, ya que, ningún compositor recurrirá nunca a la repetición exacta de un pasaje o fragmento musical. Algunas de las consideraciones a tener en cuenta son:
- El orden de aparición la Sección A y Sección B suele ser como en la exposición, aunque puede verse alterado reexponiendo antes la Sección B (lo que se conoce como una forma sonata con la reexposición invertida).
- Normalmente, en el mayor de los casos, la reexposición de ambas secciones A y B serán en el tono principal.
- Por lo tanto, la transición, aunque seguirá con sus características de aportar de movimiento e inestabilidad, empezará y acabará en la tónica principal. Y su extensión podrá variar considerablemente.
- La Sección de Cierre pasará a llamarse Coda, ya que ahora no cierra una sección, sino que se encarga de concluir toda la estructura. Podrá también variar su duración, pero será el mismo material melódico-rítmico.
Cabe señalar algunas de las variaciones más importantes y destacables que puede presentar la forma sonata. A saber:
- Sonata con Reexposición invertida: donde la Sección B’ aparece como inicio (justo después del desarrollo), seguida de la transición y la posterior Sección A’.
- Sonata sin desarrollo: toda la estructura se mantiene, pero desaparece su sección central y de carácter de desarrollo.
- Sonata Monotemática: en ella, todo acontece igual pero las frases b1, b2, b3, etc. de la Sección B no son personajes melódico-rítmicos nuevos, sino los mismos que en la Sección A.
- Rondó-Sonata: una fusión entre la Forma Sonata y la estructura Rondó en la que tanto la Exposición como la Reexposición presentan dos Secciones A, repitiendo cada una de ellas el estribillo (se verá en el curso siguiente).
¡ATENCIÓN!
Ha de quedar claro que todas las formas musicales que se estudiarán en esta asignatura son esquemas generales extraídos a lo largo del estudio de muchas obras y de muchos compositores durante muchos años (además de tener en cuenta lo mencionado en la introducción de esta unidad didáctica, que las estructuras son elementos vivos). Es decir, toda obra, en algún aspecto u otro, no se ajustará al esquema formal de forma exacta porque cada obra está viva y posee su propia naturaleza e individualidad.
No obstante, como ya anunciaba el título de la presente unidad, analizaremos y trabajaremos primeramente la forma sonata a través de la Sonatina. En la próxima unidad veremos la forma sonata a través de los grandes maestros: Haydn, Mozart y Beethoven.
13.2. La forma a pequeña escala: la sonatina
Sonatina es, literalmente, una sonata pequeña:
- respeta la estructura clásica de la Forma Sonata, pero con unas dimensiones más breves y un carácter más ligero;
- su propósito es pedagógico (al menos en el repertorio de principios del siglo XIX), puesto que eran compuestas por compositores que buscaban el trabajo técnico en su interpretación y, en muchas ocasiones, para sus propios alumnos;
- técnicamente e interpretativamente es menos exigente para el músico que una sonata, precisamente por su carácter pedagógico (pero, como siempre en el mundo de la música, habrá excepciones como la Sonatina de Ravel o la Sonatina in A major de Alkan, o algunas de las recomendaciones que están entre los anexos).
13.3. Análisis de sonatinas de Clementi, Kuhlau y Diabelli
En la presente unidad, vamos a analizar sonatinas de los compositores Muzio Clementi, Friedrich Kuhlau y Anton Diabelli.
13.3.1. Muzio Clementi (1752-1832)
El primer compositor de sonatinas que vamos a abordar y, probablemente, el más conocido por todos los pianistas (e incluso por algún que otro alumno de piano complementario). Aunque Clementi nació en la ciudad de Roma, el músico nunca dejó de viajar por todo el continente europeo.
Fue un competidor de Mozart a nivel interpretativo puesto que, desde su primera aparición pública, causó una gran impresión en la audiencia y fue el inicio de una de las carreras, como concertista de piano, más exitosas de la historia. También hay que hacer referencia a su faceta como editor de la música de Beethoven, de quien era un gran admirador y a quien conocía personalmente (de hecho, el propio Beethoven le dio permiso como su editor).
Hoy en día Clementi es apenas conocido más allá de su obra pedagógica que, por cierto, se usa en la mayoría de Conservatorios Profesionales y Escuelas de música de todo el mundo. Clementi es considerado como el padre del pianoforte moderno, instrumento que defendió como pianista, como compositor, como pedagogo, como editor y como vendedor de instrumentos. El hecho de ser coetáneo de Mozart y Beethoven como compositores de música para piano hizo mucha sombra sobre su propio trabajo y le hizo estar relegado a sus figuras de grandes maestros (al igual que le ocurrió a Kuhlau).
13.3.2. Friedrich Kuhlau (1786-1832)
Pianista y compositor alemán, tuvo que huir de adolescente a Copenhague con su familia para evitar ser reclutado en el ejército napoleónico. Allí divulgó la obra del maestro Beethoven, a quien admiraba profundamente. E, incluso, en uno de sus viajes a la ciudad de Viena, llegó a conocerlo personalmente.
Aunque se quedó ciego de un ojo con tan solo siete años debido a un accidente doméstico, eso no le impidió convertirse en un joven que demostró a toda Europa su gran talento como intérprete al piano. A este instrumento dedicó gran parte de su obra y por la que, hoy en día, es recordado, sobre todo, por aquellos pobres pianistas que hayan sufrido sus estudios técnicos. Además, con su abundante obra dedicada a la flauta se le empezó a denominar como “el Beethoven de la flauta”, a pesar de que él no sabía tocar este instrumento. Fue contemporáneo de Beethoven y Kuhlau fue fiel a las formas clásicas heredadas del preclasicismo y el Clasicismo como la sonata, rondó o variaciones. No obstante, ser coetáneo de Beethoven le costó, como a tantos otros, vivir a la sombra del genio de Bonn.
13.3.3. Anton Diabelli (1781-1858)
Fue un compositor y pianista austriaco, nacido en Salzburgo. Al igual que Clementi, fue muy conocido en su época como editor. Aunque es mucho más internacional su nombre precisamente por las Variaciones Diabelli, obra de Beethoven basada en el tema de su vals.
Inició sus estudios musicales con Michael Haydn, el hermano pequeño de Joseph Haydn. En el plano profesional, su editoral Diabelli & Co. (fundada inicialmente con otro nombre en 1818) alcanzará cierto prestigio publicando obras para piano a cuatro manos, la mayoría reducciones de obras orquestales.
En su faceta como compositor, la mayor parte de su repertorio está destinado al piano. De hecho, una de sus obras más conocidas son sus Seis sonatinas op. 163 compuestas en 1836, que son precisamente objeto de esta unidad.
ANEXOS UNIDAD DIDÁCTICA 13
Audios recomendados
Como ya hemos mencionado, las sonatinas no siempre han sido obras técnicamente sencillas y orientadas a fines pedagógicos.
- Sonatina (1903-05), de Maurice Ravel
- Sonatina in A major, op. 61 (1861), de Charles-Valentin Alkan
- Sonatina in E minor, op. 54 (1931-32), de Sergei Prokofiev
- Sonatina for piano (1947), de Carlos Guastavino
- Sonatina (1948), de Matilde Salvador
- Sonatina in C major (1958), de Aram Khachaturian
De hecho, las sonatinas no tienen por qué englobarse en un contexto de tonalidad mayor-menor. También podemos encontrarlas en estilos de música muy variados:
- Sonatina, Sz. 55 (1915), de Béla Bartók
- Sonatina Canonica su capricci di Niccolò Paganini (1943), de Luigi Dallapiccola
- Sonatina, for piano four hands (1950), György Ligeti
- Sonatina n.º 1 y n.º 5, op. 63 (1954), de Vicent Persichetti
- Sonatina for piano, op. 28 (1916), de Alfredo Casella
- Sonatina per violino e pianoforte (1975), de Salvatore Sciarrino
Lectura
Libro: El maestro invita a un concierto
Autor: Leonard Bernstein
Capítulo 11: ¿Qué es la forma sonata? [Págs. 247-265]
Complementos online
- Blog Historia de la Música: Entrada Introducción a la forma Sonata
https://bustena.wordpress.com/2016/06/25/introduccion-forma-sonata/ - Blog Me gusta el piano: Listado de Sonatinas enfocadas al aprendizaje del pianosection
https://megustaelpiano.com/repertorio-piano-sonatinas/